Historia en curso...

Mi hermana Belén

  Belén, mi hermana, siempre fue muy exhibicionista. De mostrarse mucho en redes. Su perfil, publicaciones y stories eran un verdadero infie...

Doble vida (32) EL FINAL

  Primer capítulo acá ------> Doble vida (1)



Doble vida (32) La fiesta.

 

La puerta se abrió y casi me muero de un susto cuando escuché muchas voces gritar al mismo tiempo

-        ¡FELIZ CUMPLEAÑOS JUAN!!!!

Miré incrédulo y en un perfecto semicírculo estaban, mi madre, mi hermana, mi padre, la esposa de Ricardo, su simpática hija, María, la amiga de mi hermana y un matrimonio que supe reconocer entre la contadora (diosa y cuñada de Ricardo) y el que seguramente era su marido

Menuda sorpresa. Una fiesta en mi honor, eso sí que no me lo esperaba

Mi madre y mi hermana corrieron a abrazarme. Me besaban y me apretaban entre las dos. Luego me soltaron y se sumaron mi padre, María, la caliente amiga de mi hermana y luego lo hicieron todos.

Me sorprendió que la esposa de Ricardo me dijo al oído:

-        Espero que te gusten las sorpresas

-        Si, de este tipo me gustan – alcancé a decirle perturbado

-        Espero que te gusten las otras sorpresas – me respondió

Ricardo había contratado un servicio de comida con una mujer que iba trayendo de a poco la comida y la bebida. Mucho bandejeo de finger food, champagne, tragos, todo de excelente calidad.

Fue entonces cuando me apartaron mi mamá y Ricardo de todos y me contaron que luego de encontrarse en la oficina, ambos se pasaron los teléfonos y coordinaron para armar la fiesta sorpresa.

Al poco tiempo, nos fuimos relajando todos. La noche comenzaba a caer y en un momento voy al baño. El toilette de recepción estaba ocupado y como yo tenía muchas ganas me adentré en el pasillo buscando otro baño.

Cuando estoy llegando me parece escuchar unos gemidos que venían de una de las puertas y mi curiosidad pudo más y me puse detrás para escuchar, no me animé a abrirla. No pude reconocer ninguna de las voces, pero claramente era una femenina y una masculina. No iba a ser difícil ya que no éramos tantos. Cuando salga del baño me fijo quien falta y resuelvo el misterio.

Detrás de mí, veo que se abre la puerta del baño de recepción y sale Ricardo. Lo saludo y me sonríe. Me meto en el baño, hago lo que tengo que hacer y cuando salgo luego de lavarme las manos empiezo a contar a todos los presentes. Para mi sorpresa y mayor intriga, estaban todos. Me quedé con la sensación de que había sido todo imaginación mía.

Al rato, suena el timbre y era el novio de mi hermana. Me saludó y lo acompañé presentándole al resto de la gente.

En un momento, me pide Ricardo que lo acompañe a buscar algo. Lo sigo por el pasillo. Él va delante de mí con seguridad y abre la última puerta, la de su habitación.

Mi sorpresa es total cuando dentro de la misma están mi madre y la esposa de Ricardo en ropa interior de encaje negro ambas y mirándome con deseo

-        ¿Qué pasa?  – dije incrédulo de lo que estaba viendo

-        Este es nuestro regalo de cumpleaños – me dice la mujer de Ricardo

Mi madre le toma la mano y viene con ella a mi lado y ambas se arrodillan frente a mí. Mi madre comienza a desabrocharme el pantalón. Yo no puedo creer que tengo a mi madre y a la esposa de mi jefe arrodilladas frente a mí a punto de chuparme la pija mientras mi jefe observa todo. Y encima, a metros del resto de los invitados.

Ricardo veía mi cara de incredulidad y me tranquilizó:

-        Disfrutá tranquilo, nosotros tampoco somos una familia tan convencional

-        Mmmmm a ver esta pija – dijo la mujer de Ricardo mientras mi madre sacaba mi miembro de su prisión

-        Te va a gustar – le dijo mi madre como si la conociera a esta caliente mujer

-        Me voy a ver cómo sigue la reunión – dijo Ricardo

-        Bueno, gracias – dije yo

-        No te creas que no me dan ganas de quedarme – me dijo Ricardo mirándome con una sonrisa y bajando la vista

En ese momento, Ricardo hace contacto visual con su mujer que estaba ahora agarrando mi verga y metiéndosela en la boca. Se sonrieron mutuamente. Evidentemente no era una familia tan convencional.

Mi madre no aguantó y se puso de pie para besarme en la boca y al rato bajó para robarle la pija a la mujer de Ricardo y chupármela un rato

-        Quiero sentir esa pija adentro – dijo la mujer de Ricardo

-        Si, vas a ver lo linda que se siente

Evidentemente mi madre le había contado mucho de nuestra relación.

Yo seguía de pie en el enorme cuarto de mi jefe con mi madre chupándome la verga y la mujer de Ricardo que se desnudaba y se tiraba en la enorme cama, juro que nunca había visto una tan grande, para que yo me la cogiera

-        Vení, cogeme que desde la última vez que estuviste acá que tengo ganas de que me la metas

-        Yo también – le respondí y me fui a coger a la esposa de mi jefe

Me acomodé y puse la punta de mi dura verga en la entrada de la concha de la mujer de Ricardo que me miró mordiéndose el labio inferior y me dijo

-        Cogeme Juan, cogete a la esposa de tu jefe, dale!

-        Ajjjj siii? ¿queres que te coja?  – le pregunté

-        Siiii, cogeme como te coges a tu mamá! – las palabras salían de la boca de ella y no podía creerlo

-        Siiii, mi nene me coge así! – le decía mi madre al oído

Mi madre me sorprendió ahora colocándose detrás de mí y abriéndome el culo mientras yo no dejaba de cogerme a la mujer de Ricardo

-        Te voy a chupar el culo – me dijo mi madre

-        Mmmmm, siiiii, chupale el culo y dejáselo bien mojado que le quiero meter un dedo – decía la perversa mujer de mi jefe

En ese momento siento que la puerta de la habitación se abre y entran Ricardo, con mi hermana y su novio. Mi confusión era total, pero luego lo fui entendiendo todo. Cuando me quise dar cuenta Ricardo sacó su verga y mi hermana se agachó a chupársela.

Aunque no me sorprendió tanto, ver al novio de mi hermana arrodillarse a su lado y mirar tan cerca la mamada de su novia, era algo excitante por demás

-        ¿Qué pasa? ¿Vos también queres chupármela?  – le pregunta Ricardo a Joaquín, el bisexual novio de mi hermana

-        Mmmmm – Natalia lo miraba sin sacarse la pija de Ricardo de la boca

Ahora fue ella quien lo invitó a su novio y juntos comenzaron a chuparle la pija a mi jefe.

Yo pensaba que no quedaban más sorpresas. Imaginaba que de alguna manera todo el resto de los invitados, se habían ido, pero no.

La puerta volvió a abrirse y entraron, de la mano, mi padre y María, la amiga de mi hermana. Esto iba a convertirse en una orgía total.

-        Quiero ver como la chupa esta morochita hermosa – dijo Ricardo

-        Yo le dejo el lugar – dijo mi hermana y se levantó obligando a su novio a hacer lo mismo

Pude ver que Joaquín quiso seguir chupándole la verga a Ricardo, pero se resignó a ir conde estaba mi madre y desde atrás, sin dudarlo un segundo, comenzó a cogérsela

Juro que eso sí que me sorprendió. Ver a mi madre siendo cogida por el novio de mi hermana fue algo que no esperaba.

Mi padre se paró al lado de Ricardo y se hizo chupar la pija por María que disponía ahora de dos vergas solo para ella.

La orgía era total y no podía dejar de mirar para todos lados. Mi madre ahora me metía un dedo en el culo mientras era cogida por Joaquín y mi hermana le chupaba el culo totalmente depilado a su novio

-        ¿Quien le va a estrenar el culo a mi novio?  – preguntó mi hermana

Ninguno de los hombres pareció hacerse cargo y la cara de decepción de mi hermana era tremenda.

No sé si fue por eso, pero lo que siguió no me lo esperaba de ninguna manera. Mi padre se arrodilló en la alfombra detrás de Joaquín y mi hermana se lanzó a chuparle la pija mientras le metía dos dedos en el culo a su lampiño novio.

-        ¿Te vas a coger al novio de tu hija?  – le dijo mi hermana

-        Siiii, ese culito va a ser mío

-        Mmmmm, siiii suegrito, meteme la pija, por favor!

-        Agggggg que caliente que estoy! -  decía mi padre

-        Siiii, estás muy caliente, papi? – le preguntaba mi hermana

Ya estaba todo dado, la orgía era total. Éramos ocho personas en esa habitación. Miro a la puerta y no puedo creer lo que veo, alguien más se sumaba a la fiesta

¡La cuñada de Ricardo, su marido y la hija de Ricardo también! Era toda una locura.

Pero si sorpresas faltaban, me quedaba ver a la chica que servía las copas y llevaba la bandeja hacía unos minutos, levantando la ropa que estaba tirada por el suelo. Al rato la misma, chica apareció en ropa interior y estaba realmente muy buena. No podía creerlo. ¿Ella también sabía todo esto? El detalle era que traía en cada mano una botella de champagne.

La hija de Ricardo se fue rápidamente a chuparle la pija a su tío mientras la diosa de Carolina, la contadora cuñada de mi jefe, se me acercaba y me decía al oído

-        Queres cogerme como te estas cogiendo a mi hermana?

-        Mmmmm – las hermanas se besaron en la boca y yo aproveché para participar de ese cálido beso

Nos dimos un beso de tres y nuestras lenguas parecían sincronizadas. Pocas veces me había sucedido.

-        Cogeme a mí – me pidió Carolina mientras miraba a su marido

La agarré a Carolina y comencé a cogérmela despacio y a buen ritmo. Contrariamente a lo que siempre imaginé, ver tanta gente desnuda y haciendo el amor, hacía que me tardara más en acabar. Eso lo disfrutó la cuñada de mi jefe, que acabó al poco tiempo mirándome desafiante

-        Aghhhh como me haces acabar, nene!!!

-        Mmmmm sí? ¿Te gusta cómo te cojo?

-        Siiii cogeme

-        Desde que viniste por primera vez a la oficina que quiero cogerte – me sinceré

-        Ayy siii aghhhh te ví como me mirabas ese día – decía ella acabando

-        Aghhhhh me encantás, Carolina – le decía yo

-        Aghhhh ahhhhhh me estás haciendo acabar como loca, aghhhhh – se iba ella en un orgasmo hermoso

El marido de Carolina, es decir el concuñado de Ricardo, estaba ahora agarrando a mi mamá que lo miraba deseosa. Debo reconocer que me dio un poco de celos, pero llegados a estas alturas, entendí que no tenía ningún derecho sobre ella. La hija de Ricardo también fue con ellos y le chupó las tetas a mi madre y se dejaba hacer por los otros dos mayores.

La orgía se desarrollaba con total desenfreno. Mi padre taladraba el culo de su yerno.

Mi hermana, la protagonista de toda esta historia, fue hacia Ricardo y le pidió sin dudar:

-        Ricardo, quiero que me cojas por el culo

Miré a los ojos a Ricardo y pude ver el deseo en los suyos.

-        Sí, mi amor, vení que te cojo el culo – le dijo a Natalia

-        Y quiero que mi hermano me coja la concha – remató ella

-        Ayyyy siiii los tres cogiendo

No dudé y me puse de pie para acercarme a ellos. Como una metáfora de mis últimos tiempos y de cómo había cambiado mi vida por ellos.

Ricardo, mi hermana y yo cogíamos de manera sincronizada. Yo me acosté y Natalia comenzó a cabalgarme. Ricardo se puso detrás y comenzó a chuparle el culo a Natalia. Algún lengüetazo se le escapó y recorrió el tronco de mi verga

El placer era total y me lo provocaban las dos personas que más me habían ayudado. Mi hermana gritaba ahora

-        Cogeme el culo, Ricardo, por favor

Mi madre y el resto de los presentes se giró a mirarla. El espectáculo era hermoso. Ricardo y yo haciéndole una doble penetración a mi hermana.

-        Aghhhhhh aghhhhhh – gritaba Natalia cuando sintió la verga de Ricardo entrar sin dilación

-        Mmmmm. Cogeme hermanita – le dije mirando a Natalia a los ojos

-        Aghh, ¿te gusta que te cojamos con tu hermano? – preguntaba Ricardo al oído

Mi hermana empezó a temblar de excitación como una hoja vibrando entre nuestros cuerpos. Ricardo me miró con preocupación, pero yo sabía que esos temblores eran la antesala de un orgasmo tremendo de Natalia

-        Vas a acabar? – le pregunté

-        Aghhhhh agg mmmmmm – No podía articular palabra mi hermana y movía la cabeza asintiendo

-        Aghhhhhhhh – Ricardo como un experto la penetró bien profundamente y se quedó inmóvil mientras descargaba todo el peso de su cuerpo

-        Aghhhh voy a acabar yo también – le dije a mi hermana

-        Aghh ahhhhh aghhhh aggggggg -  mi hermana acababa ahora como loca

-        Aghhh ahhhh aghhh siiii tomá tomá acabo yo también – gritaba yo ahora

-        Aghhhh ahí va mi leche también – decía ahora Ricardo y pude sentir su verga palpitante acabando en el culo de mi hermana

El placer era total y pude sentir el peso de ambos cuerpos desmayándose sobre mí, pero no me importó. Estaba feliz, pletórico y por sobre todo agradecido con estas dos personas que habían sido tan generosas conmigo.

La orgía se fue apagando lentamente con mi padre acabando en el culo de Joaquín y el mismo Joaquín cogiéndose a María y a la hija de Ricardo.

El cuñado de Ricardo acabó sobre las tetas de su mujer y la esposa de Ricardo le chupó la leche directamente en los pechos de su propia hermana.

Volvió a haber segundos turnos de coitos y chupadas, aunque ya algunos se empezaban a retirar de a poco.

Ricardo, que seguía como loco, al poco tiempo estaba tomando champagne nuevamente. Recordé la marca del champagne, que nunca había tomado en mi vida Pommery y supe que debía ser carísimo.

No tardó más de 20 minutos en estar con la verga totalmente parada y siendo chupado por mi hermana y mi madre. Era evidente que sentían una especie de agradecimiento por todo lo que Ricardo había hecho por mí en los últimos tiempos

A esta altura solo estábamos las dos familias completas. Ricardo, como dije siendo chupado por mi hermana y mi madre al mismo tiempo. Yo que estaba siendo chupado por la hija de Ricardo y mi padre que estaba cogiéndose a la mujer de Ricardo.

Era todo felicidad y placer. Goce y disfrute. Sexo y bebida. Lujuria y deseo.

En ese momento miré a Ricardo y vi que mi hermana le estaba metiendo dos dedos en el culo mientras le chupaba la pija con ahínco. Mi madre lo besaba en la boca.

Algo raro noté. Mi madre se separó de Ricardo y lo miró con extrañeza. Ricardo no sonreía, estaba todo colorado y con un rictus de espanto. Llevó una mano a su corazón y me miró por última vez con cara de pánico.

Mi hermana abajo chupaba y tragaba la última acabada de mi jefe en su vida. Cuando quiso darse cuenta eran todos gritos y no de goce, sino de drama y preocupación

-        ¡Llamá al SAME!  – dijo su mujer

-        Ya llamo – dije yo buscando mi teléfono que vaya a saber dónde estaba

Fue increíble que el SAME llegó a los 10 minutos y nada pudo hacer. La mujer de Ricardo lloraba. Su hija, mi madre y mi hermana hacían lo mismo.

Ricardo, mi querido jefe, mi mentor, ya no estaba vivo entre nosotros. Murió acabando en la boca de mi hermana.

 

FIN

 

Epílogo

 

Ahora estoy en el departamento de Ricardo con su esposa hablando del tema herencia y acuerdos de continuidad del negocio

Ella me miró y entre lágrimas me dijo:

-        Él te quería como a un hijo, quiero que sigas manejando todo vos y hagamos un 50% vos y un 50% ya lo ponemos a nombre de mi hija

-        No me parece justo, esto es en más de un 80% de ustedes – le dije

-        ¿Ves? Por eso te quería tanto Ricardo

-        ¿Que? No entiendo…

-        Por tu honestidad y tu hombría de bien – me dijo esa mujer entre lágrimas y abrazándome con fuerza.

Sellamos el pacto entre los dos y quedé en enseñarle todo a su hija para que sea mi socia no solamente de capital, sino que también tenga el control sobre las decisiones que se tomarían de ahora en más.

Ahora vuelvo a mi departamento de Puerto Madero sabiendo que soy prácticamente millonario, pero un pesar se apodera de mí. No creo merecer esto y mucho menos de esta manera.

Al rato llega mi mamá y me cuenta toda la verdad de esa fiesta y de su encuentro con Ricardo aquella vez que se la presenté en la oficina. Ambos disimularon muy bien. Ya se conocían de un boliche swinger muy conocido de Buenos Aires. Ellos habían estado juntos y se compartieron rápidamente los teléfonos sin que yo me diera cuenta para armar la fatídica fiesta que terminaría con la vida de mi benefactor.

Mi hermana, la protagonista de este relato, con quien inicié esta seguidilla de hechos sexuales, morbosos y en algún momento humillantes, va a ser de ahora en más una persona de total confianza en la etapa que viene.

Va a ser difícil, no debemos mezclar sexo y trabajo con ella, pero no veo la hora de que me chupe la pija debajo del escritorio. ¿Junto con Constanza, la hija del malogrado Ricardo? ¿Por qué, no?


Gracias a todos por las manifestaciones de cariño a lo largo de esta serie

Pueden dejarme sus comentarios en reybaco2005@hotmail.com

O en Telegram @reybaco2005