Nos habíamos cogido a mi madre
junto con Jeffrey, mi negro compañero de la facultad. Me acosté y él hizo lo
propio a mi lado. Por suerte lo hizo luego de ponerse el bóxer y ocultar su
descomunal miembro.
Ninguno de los dos se animaba a
hacer un comentario. Fui yo el que rompió el silencio y girándome de costado le
pedí.
-
Jeff, por favor, no le cuentes a nadie esto que
pasó con mi mamá
-
Mira Nico, lo que pasó acá va a quedar acá, lo
que no puedo prometerte…
-
¿Que?
-
Es que no quiera volver a cogerme a tu madre –
se sinceró el negro
-
Bueno, solo si saber guardar el secreto – me
sonreí
-
Por supuesto, ahora cuéntame, ¿es la primera vez
que tienes sexo con tu madre?
-
No, fue hace poco en las vacaciones de verano,
volviendo de Mendoza
-
Ah bueno…
Nos dormimos y al otro día me
despierto somnoliento y sintiendo unos ruidos que venían del cuarto de mi
madre. Me costó entender que había una cama a mi lado y que estaba vacía.
Entonces comprendí todo. Jeffrey ya se había levantado y le estaba dando el
desayuno a mi madre.
Con la verga muy dura me levanté
y a medida que avanzaba, los gemidos se hacían más fuertes. La puerta estaba
entornada. Cuando la abrí pude ver el cuadro totalmente.
Mi madre estaba en la cama a
cuatro patas y Jeffrey la estaba embistiendo desde atrás. En cada empellón su
pija salía más de 10 centímetros y volvía a entrar en la concha de mi madre sin
ningún riesgo de salirse por completo.
-
Aghhhh ahhhhhh si siiiii cogeme asiiiiiii
-
Mmmmm me encanta tu cogerte, hermosa – le decía
el negro
-
Que pija hermosa que tenés Jeff, me encanta, me
llena toda – decía mi mamá
Yo miraba la escena desde la
puerta y decidí que lo mejor era dejarlos disfrutar a ambos y me saqué la pija
para pajearme mientras los miraba.
Mi madre notó mi presencia y me
invitó a pasar.
-
Vení que te la chupo mientras Jeff me coge
-
No, quiero verlos coger a ustedes
-
¿Estas seguro que no queres?
-
Sí, quiero verlos a ustedes
Jeffrey comenzó a bombearla con
muy buen ritmo y de a ratos le sacaba la pija y se la pasaba por el agujerito
del culo. Cada vez que la sacaba y hacía ese movimiento un hijo de flujo salía
de la caliente concha de mi madre.
Un dedo pulgar de Jeff se coló en
el ano de mi madre y ésta suspiró.
-
Aghhhhmmmmm
-
Me encanta tu cola, preciosa
-
Mmmmmmm
Me fui a mi cuarto y agarré mi
celular para filmar esta escena pornográfica con el mayor detalle posible.
-
¿A dónde vas? – me preguntó mi madre
-
A buscar mi teléfono
Volví filmando desde el pasillo y
entré captando un polvo realmente digno de una productora porno. El cuarto
estaba iluminado y el color de Jeffrey contrastaba de manera perfecta con el de
mi madre. Sus tetas se balanceaban y se movía con una gracia absoluta mientras
era penetrada vaginalmente por la pija de Jeffrey y analmente por su dedo
pulgar.
-
¿Que haces? – dijo mi madre
-
Inmortalizar este momento – dije mientras grababa
en detalle y acercaba el teléfono a sus partes para captar mejor la penetración
-
Aghhhhh Mmmmm – decía mi madre
-
Te quiero coger el culo – dijo Jeffrey
-
Pero me lo vas a romper con esa pija… - se
quejaba mi madre
-
No creo, quiero probar
-
Despacio… - decía mi madre
-
A ver…
Mi amigo sacó su negra
herramienta con la cabeza morada y aproveché para tomarlo en primer plano.
Apoyó la punta de su verga en el lubricado y fruncido agujero de mi madre e
hizo presión.
Su culo se abrió como una flor
recibiendo el glande de mi negro amigo.
-
Aghhhmmmmmm despacio – decía ella
-
Siiiiii
Yo tomaba el teléfono con firmeza
y nunca dejaba de grabar la escena.
-
Ayyy ssssssshhhhh aghhhhh – mi madre se quejaba
-
Me encanta tu culo estrecho – decía el negro
-
Mi culo no es estrecho, tu pija es muy grande –
decía ella con razón
-
Aghhhh ya entró mas de la mitad – le dijo él
-
Mmmmm asiiii bombeame despacio
Jeffrey comenzó a efectuar cortos
movimientos adelante y atrás entrando cada vez más profundamente en el rosado
ano de mi madre. Era una peli porno hermosa.
Mi madre comenzó a frotarse la
concha y estaba al borde del orgasmo cuando Jeffrey anunció que estaba a punto
de acabar.
-
Aghhhh estoy por llegar
-
Siiii acabame el culo – dijo mi madre y para mi
sorpresa miró a la cámara
Esa actitud tan puta de mi
progenitora nunca me la esperé y no solo eso. Siguió profiriendo gritos como
una auténtica actriz porno
-
Siiii dale cogeme el culo Jeff
-
Ayyy siiiii estoy acabando
-
Mmmmm siiii lléname el culo de leche – utilizó
un acento centroamericano
-
Siiii ¿quieres que te lo llene?
-
Si, lléname de leche mi amor – le decía ella
Era surrealista, parecía una
porno caribeña. Pude captar el momento exacto en el que el pene de Jeffrey
latía y se sacudía acabando.
-
Aghhhh siento tu pija acabando mi amor – insistía
mi madre
-
La sientes hermosa – decía él
-
La siento, se siente muy bien
Jeffrey fue sacando la pija y yo
no pude evitar acercar el celular a escasos centímetros para captar todo con
precisión. Me quedé tomando en primer plano el agujero totalmente abierto de mi
madre y pude ver como una gota gruesa de semen empezó a correr y se deslizaba
saliendo lentamente de su detonado culo.
Fue una toma hermosa. Terminé de
grabar todo con la pija totalmente parada.
Mi madre se acostó y Jeffrey hizo
lo propio a su lado abrazándola y besándola con auténtica ternura.
En un momento, tuve la sensación
de que mi amigo me estaba invadiendo al verlo en la cama con mi madre y ambos
completamente desnudos sobre esas sábanas blancas.
Fue entonces que todo se
precipitó de una manera tremenda.
Recibí un mensaje de mi tía y
detrás otro y otro.
-
Hola Nico
-
Hola
-
¿Estás? ¿Tu mamá?
Mi tía parecía desesperada
-
Si, tía, ¿qué pasó?
Juro que en ese momento no me
imaginaba absolutamente nada de lo que pasaría a continuación. Puedo ver en el
teléfono que mi tía estaba grabando un audio.
La miro a mi mamá que me miraba
con intriga
-
Es la tía que me llama y parece preocupada
Mi madre atina a agarrar su
celular que había dejado en silencio y ve la pantalla. Me mira con
preocupación.
-
Tengo 6 llamadas perdidas de mi hermana… un
sábado a la mañana… algo pasó
Fue entonces que reproduzco el
audio de mi tía en altavoz y sale su voz llorando y diciendo
“Decile a tu mamá que me llame, mataron
a tu tío hace una hora”
El rostro de mi madre cambió por
completo y se nubló su mirada. Un grito ahogado salió de su boca
-
Noooooo
Mi madre agarró el teléfono y
llamó a su hermana. Así desnuda como estaba fue a la cocina caminando con el
aparato en la mano.
Jeffrey se vistió de inmediato y
supo que el horno no estaba para bollos y se quedó sentado revisando los
apuntes mientras anotaba algunas cosas en un cuaderno.
Yo hice lo propio. Demás está decir
que mi verga bajó al instante y me cambié de ropa esperando que mi madre
cortara la comunicación.
Ahora mi madre estaba con una
bata, mientras lloraba junto con su hermana.
Cuando cortó supe que a mi tío lo
habían matado para robarle y que nos tomaríamos un avión para acompañar a mi
tía unos días en Mendoza.
Continúa acá ----------> En Mendoza, mi prima extraña a su papi
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