Cuando María volvió, desnuda como estaba, a su habitación, encontró a Luciano y Sofía que seguían besándose. Se quedó mirándolos y admirándolos.
Sofía recorría el cuerpo de su
novio con ambas manos y Luciano hacía lo mismo agarrando fuertemente a su
frágil, pero caliente, novia. Se besaban con lujuria, se tocaban con deseo.
Realmente no podía entender como aún seguían con tantas ganas. Es verdad que
eran jóvenes, pero habían estado teniendo sexo hasta hacía unos minutos.
Se acercó a los dos y los besó
alternativamente. Primero a Luciano y luego a Sofía. La niña parecía
desesperada por la lengua de su suegra. Cada vez que su boca se acercaba la
reacción de ella era la misma.
-
Mami queremos bañarnos en el jacuzzi, le dijo
Luciano
-
Bueno, vayan…
-
No, con vos…dijo Luciano tímidamente
-
¿Los tres?
A María se le humedeció aún más
la concha al imaginarse en la burbujeante tina con su hijo y con su joven
nuera.
-
No sé, tu papá va a llegar en cualquier momento…
-
Falta una hora por lo menos, y traé el teléfono
por las dudas, simplificó Luciano
María fue desnuda a buscar su
teléfono y volvió. Luciano ya estaba haciendo correr el agua del jacuzzi y
Sofía estaba parada como Dios la trajo al mundo. María se detuvo un momento a contemplarla
y realmente era hermosa. El abdomen totalmente plano, los pechos pequeños, pero
turgentes, la cola dura y la cintura dibujaba una curva perfecta. La miró a los
ojos, siguió el contorno de su pequeña nariz y sus labios rosados.
Sofía la miró con extrañeza al
sentirse tan observada y solo atinó a decirle
-
¿Pasa algo, Meri?
-
Sos hermosa, respondió María
-
Gracias
María se acercó y la besó
profundamente. Sofía recibió el beso y lo hizo más intenso, si es que aún se
podía. Luciano miraba la escena y una nueva erección empezaba a producirse en
su cuerpo. Se sentó en el borde de la tina, que comenzaba a llenarse y activo
los chorros produciendo un ruido que sacó a las chicas de su erótica escena.
Sofía se giró y lo vio a su novio
sentado y estirando una mano tomó la de él para entrar en el jacuzzi. María
hizo lo mismo y besó a Sofía nuevamente. Se arrodillaron ambas y comenzaron a
acercarse a la verga de Luciano, que estaba lista para una nueva batalla.
No dudaron en chupársela entre
las dos. El agua caliente bañaba las piernas de las chicas y jugando lo tiraron
a Luciano dentro con ellas. Sofía no dudó en agarrarle la pija y sentarse
encima de él. María aprovechaba para chuparle una teta a Sofía mientras Luciano
chupaba la otra. La escena era de lo más erótico. María volvió a besar a Sofía
y se unieron junto con su hijo en un beso de tres súper caliente.
María fue hacia donde estaban los
productos para el baño y tiró unas sales. La espuma no tardó en aparecer. Sofía
seguía cabalgando a su novio y besándolo con desenfreno. Cuando María vio el
jabón se le ocurrió una idea muy perversa y apretando el gatillo se colocó un
poco en las manos y comenzó a recorrer el cuerpo de los jóvenes enjabonándolos
por completo.
Repitió esta operación algunas
veces y en un momento bajó a la cola de Sofía y pasó jabón por la zona y por
los huevos de su hijo que seguía en la penetración. Se puso un poco de jabón en
el dedo y lo metió en la cola de Sofía. La nena no estaba preparada y dio un
respingo y se giró mirando a su suegra. María la besó en la boca y le metió el
dedo en el culo más profundamente
-
Aghhhhh que me haces, Meri?
-
Tenés una cola hermosa, le dijo María
-
Siiiii? ¿Te gusta?
-
Siiiiii, mucho
-
Ya me la chupaste con Florencia…
-
Mmmmm, decía Luciano mientras sustituía el dedo
de su madre por uno suyo
-
Aghhhhhh, el calor del agua había ayudado a la
dilatación de Sofía, pero aun así su ano era muy pequeñito
María salió intempestivamente y
fue hacia el cajón y trajo algo que los chicos no llegaban a identificar.
-
¿Que es eso, mami?
-
Vení, dijo María
María se colocó arrodillándose
con el cuerpo fuera de la tina y exponiendo todo su culo a los jóvenes. Sin
dudarlo, apretó el pomito de lubricante y lo colocó en sus dedos y los llevó a
su culo diciéndole a su hijo:
-
¡Quiero que me la metas en el culo!
-
Ayyyy mami.
-
Siiii, por favor
María sabía que el miembro de su
hijo era grande, pero sintió la necesidad y rápidamente se metió un dedo y
luego otro más y lubricó aún más la zona
-
Estás segura, mami
-
Sí, mi amor quiero que me cojas el culo
-
Aghhhhhh, gritaba Luciano
-
Pero, primero quiero que me meta dos dedos
Sofía. Dijo caliente para hacer participar a su nuera
-
Siiiii, dijo ella y le metió primero uno y
después dos
-
Mmmmm, Luciano miraba la escena totalmente
absorto
Los pequeños dedos de Sofía se
movían entrando y saliendo de la cola de María con mucha facilidad y
provocándole un placer enorme
-
¿Te animas a meterme otro dedo más? Preguntó
caliente María
-
A ver
A Sofía le asombró ver que un
tercer dedo entraba con tanta facilidad y empezó un mete saca que volvía loca a
María
-
Meteme la pija, Luciano
-
Ya mami
-
Ayudalo, Sofi, decía María
Sofía agarró la pija de su novio
y la apoyó en el centro del fruncido agujero de María. Luciano empujó un poco y
la cola se abrió dando paso a la enorme cabeza de la verga de su hijo
-
Siiiii, metémela
-
Aghhhhh
-
Haceme la cola, daleeeeee, suplicaba María
-
Mmmmm, Te vas coger a tu mamá por el culo…decía
Sofía
Las palabras salían de la boca de
Sofía y de María sin preguntarse cómo ni por qué.
-
Siiiiii, cogeme el culo
-
Siiiii, cógele el culo a tu mami
-
Mmmmm, Luciano empujaba y sentía la resistencia,
pero no cejaba en su intento
-
Siiii, dale empuja, rómpeme el culo
-
Daleeeee cógele el culo a tu mami, repetía Sofía
totalmente enajenada
-
Aghhhhh, Luciano empujó un poco más y media
verga ya estaba dentro de su madre
-
Dale cogeme metémela todaaaaaa
María estaba totalmente sacada.
Necesitaba ser penetrada por completo por esa verga. Le dolía, pero la
necesitaba adentro. Toda. Era tan así, que fue ella la que empezó a empujar
hacia atrás para sentirse totalmente penetrada. Era desgarrador, pero
necesitaba sentirse completamente llena de la pija de su hijo. Solo cuando
sintió que sus nalgas chocaban contra él, se quedó quieta un momento para
recuperarse
-
Aggggmmmmmmm dijo
-
¡Te la metió toda! Decía Sofía asombrada
-
Siiiiii, decía Luciano
-
¿Viste como entró toda? Le decía Sofía a su
novio
-
Mmmmm, Luciano tomó a su madre de las caderas y
se retiró un poco para atrás y volvió adelante penetrándola a su madre
-
Aghhhhh decía María
-
Cogele el culo, lo incitaba Sofía
-
Mmmmm, si si si si si, haceme la cola
-
Siiiii?
Luciano ya iba y venía, adelante
y atrás, un mete saca perfecto y coordinado. Se empezó a poseer tanto como la
madre y comenzó a soltar una catarata de insultos sobre su madre
-
¿Te gusta que te coja, putita? Le decía a su
madre
-
Aghhhhhh, un escalofrío recorrió a María cuando
escuchó que su hijo la llamaba “puta”
Creo que fue el detonante para
que María se soltara por completo
-
Siiiii, cogeme hijo de puta!
-
¿Si? ¡Putita mía! Queres que te coja el culo
así?
-
Rompele el culo a mamá! ¡Dale! – decía María totalmente sacada
Sofía se quedaba callada y se
tocaba masturbándose mientras solo tenía oídos para la pareja incestuosa que
cogía sin parar en el enorme baño de la casa de Canning.
-
¿Si mami? ¿Te gusta que te rompa el culo así?
-
¡Si haceme la colita, hijo de puta!
-
Es verdad soy un hijo de puta porque sos muy
puta, mami
-
Y te gusta tener una mami tan puta
Sofía no podía creer el nivel de
diálogo entre madre e hijo. ¿de dónde sacaban esas palabras? ¿ese era su novio?
¿y Meri? Tan tierna que parecía…Sofía había acabado y estaba por acabar una vez
más cuando oyó a su novio casi gritar
-
Te voy a acabar en el culo, putita
-
Siiiiii, lléname el culo de leche
-
Siiiii, mamiiiiii, acaboooooo
-
Aghhhhhh yo también gritaba María
-
Aghhhh ahhhh ahhhh ahhhh, bramaba Luciano
mientras potentes chorros penetraban en las entrañas de su madre
-
Aghhh ahhh ah ahaaaaaahhhhhh, sentía los
latigazos María
-
Yo también, dijo Sofía en un tono apenas audible
María había tenido sexo anal,
pero nunca había experimentado acabar mientras la cogían por el culo. Fue tanto
el éxtasis que sintió que se orinaba, pero no era la excitación que le hacía
vivir sensaciones que nunca había experimentado.
-
Aghhhhh, se oía a Sofía en un suave gemido
-
Agggghhh, sentís esto? Decía María que apretaba
la cola para hacer gozar aún más a su hijo
-
Aghhhh siiiiiii, que bueno estooooo, decía
Luciano
María apretaba el ano y volvía
loco a su hijo. Sofía no paraba de acabar. Luciano sentía que no podía acabar más,
pero seguía haciéndolo. María notaba los espasmos en la verga de su hijo. Sofía
miraba la escena increíblemente morbosa, un hijo haciéndole la cola a su madre.
Luciano se afirmaba a las caderas se su madre y dejándose caer hacia adelante,
le dijo
-
Te quiero, mami
-
Mmmmm, María giró la cabeza y lo besó
Un sonido en el teléfono de María
los sacó a todos del momento que estaban viviendo. Sofía se lo alcanzó y pudo
comprobar que era un mensaje de Sergio que en 15 minutos llegaba.
Por suerte, era en el baño y no
en la habitación toda la escena. Calculó que le daba tiempo y se levantó
rápidamente y le dijo a Luciano que agarre el auto y la lleve a Sofía a la
casa. María agarró las toallas y las sábanas y las sacó metiéndolas en el
lavarropas. Se puso a hacer la cama con sábanas nuevas. A los 10 minutos, ya
tenía todo listo. Acomodó lo poco que quedaba, activó los aromatizadores y un
dolor en la cola le hizo recordar lo vivido hacía escasos minutos.
Sergio entró y la saludó. No notó
nada raro.
(continúa acá )
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