Volví con Lucía a la pileta y Cesar y mi cuñada estaban charlando, nadando y riendo como locos. Que les pasaba? Se habrían entendido de alguna manera ya que las pocas veces que se habían visto no había nada de onda entre ellos, y se notaba.
La cosa me dio muchas sospechas ya que a ambos se les notaba un brillo en la mirada muy raro. Por la noche, cuando estuve sola con Cesar y después de que éste me pida perdón y me jure que no lo pudo controlar, me contó lo que había pasado en la pileta con Mariela con lujo de detalles.
Cesar estaba acostado boca abajo en el borde conversando con Mariela que estaba en la pileta. La conversación derivó a Lucía y lo buena que estaba. César la empieza a pinchar diciéndole:
Muchas mujeres parecen unas ninfómanas y en la cama son una heladera.
Yo no creo. Lucía para mí es muy caliente.
Para mi es todo un personaje…
Te juro que no…
Y vos como sabes?
Te lo voy a contar pero me tenes que jurar que no vas a decir nada.
Ok
Ayer cuando estábamos en la pileta con las chicas, Lucía me mostró un pecho para que viera como le había quedado…
Mmmm, y?
Bueno.. que entre una cosa y la otra y…
Y que? Pregunta Cesar muy caliente
Mmmm no debería contarte..,
Dale!
Bueno que entre preguntas surgió si había perdido sensibilidad en el pezón y…
Si…
La cosa es que terminó confesando que tenía los pezones súper sensibles y Julieta me instó a que se lo toque y se lo apreté y acaricié un rato…
Mmmmmm
Porque no te tirás a la pileta, te vas a morir.
No puedo.
Por?
Estoy un poco conmovido con el relato tuyo con Lucía y se nota en mi malla.
Dale! Tirate!
Cesar tomó coraje y se levantó. Tenía una carpa tremenda…
Upaaaaa! Dijo Mariela mirándole el bulto descaradamente. Tanto te calentó la conversación?
Yo imagino muy bien. Y me imaginé a vos con la teta de Lucía en la mano y…
Y que?
Si te cuento todo lo que me imagino…
Contame. Yo te conté y confié en vos
No es una cuestión de confianza. Son cosas muy fuertes las que me imagino…
Mmmm contame que no me voy a horrorizar
Nada. Solo que me imaginaba que no quedaba solo en una caricia a Lucía la cosa.
Si? Y que mas imaginas?
Que a la caricia le seguía un beso…
Siiiii, puede ser pero tanta historia por un beso en una teta… de eso tenías miedo?
Noooo es que si te lo digo todo y en el lenguaje en que lo pienso te juro que te ofendés. Por como sos vos, seguro que te ofendes.
No te creas. Soy mas atrevida de lo que parezco. Hagamos una cosa. Vos empezá a contarme y vas subiendo el tono en la manera en que lo contás y si no te detengo, seguís.
Ok. Pero te bancas que hable un poco sucio.
Claro nene. Yo tambien puedo ser muy chanchita en la intimidad…
Ok. Preparate entonces.
Dale.
Bueno como me decías que estabas acariciando ese pezón que seguramente era muy lindo, oscuro y bien parado…
Siiii, era así.
Despues le acariciabas descaradamente las dos tetas con ambas manos y le apretabas los pezones.
Siii, me gusta como lo contás.
Entonces acercas tu boca a la de ella y abriendola un poco la besas metiéndole la lengua casi hasta la garganta.
Jaja. Me gusta lo que se te ocurre. Decía Mariela mientras debajo del agua se acomodaba la bikini y sentía su humedad vaginal. Seguí
Después bajas con tu boca y tu lengua hasta las tetas de ella y le empezar a chupar los pezones. Te volves loca y te gusta. Mientras César decía esto se baja la malla se agarra la poronga totalmente erecta, se la muestra a Mariela y la guarda diciendo: Me la tengo que acomodar porque me molesta de lo parada que la tengo.
Mmmm. Ajá? Si…
Bajas una mano y le tocas la concha por afuera de la bombacha y sentís su humedad.
Siiii. Decía Mariela totalmente excitada.
Ella te mira a los ojos. En ese momento Cesar y Mariela se miran a los ojos. Y agarra un tirante de tu corpiño y lo baja así... Y le baja el tirante del corpiño dejando medio pezón de Mariela a la vista.
Mmmm y que mas te imaginas
Que ella baja su mano y te acaricia el pezón asi… y baja su mano y roza con su dedo gordo la punta de su pezón
Mmmmm, mejor paremos, dice Mariela
Nooooo. Todavía falta. Tambien me imagino que baja con su cabeza a chuparte las tetas…
Como?
Así.
En ese momento baja su cabeza y aprisiona su pezón con los labios.
Ella lo agarra de la cabeza y aprieta contra su pecho como obligandolo a que se quede chupando toda la vida. El con las manos ya le empieza a acariciar la cola por debajo del agua metiéndole la mano dentro de la bikini. Ella por su parte baja su mano y le empieza a hacer una paja dentro del short. El siente que debe corresponderla y comienza a meterle un dedo en la concha que está totalmente empapada. Ella sigue pajeándolo y el siente que va a acabar. Es en ese momento que decide hacer una cosa. La toma fuerte de las caderas y la levanta sacandola de la pileta y sentándola en el borde. Le abre las piernas, le corre la bikini y le empieza a chupar la concha con una maestría impresionante. Le pasa la lengua por lodo el largo, atrapa su clítoris con los labios y lo mordisquea. Le mete dos dedos mientras se dedica a chuparle y morderle este botoncito de placer que la hace acabar en un grito ahogado:
Aaaaaahhhhhhh. Ssssssiiiiiiiii. Acaboooooooo.
El la empuja un poco hacia delante, le mete un tercer dedo en la concha. Los mete y los saca y sigue chupando su clítoris. Ella se encamina hacia un nuevo orgasmo. El en un movimiento le vuelve a meter dos dedos y con el tercero empieza a hurguetear en el ano ella.
Ahhhhh grita ella. Siiiiiii. Seguí asiiiii.
El mete media falange de su dedo en el culo.
Siiii aaasssssiiiiii. Seguí asiiiiiii.
El sabe que ese es el camino y no duda. Le muerde el clítoris al tiempo que hunde todo su dedo en el culo de ella.
Aaaaaaaaahhhhhhh, acaba ella con un grito y apretando mas, si es que se puede, la cabeza de Cesar contra su pelvis.
El siente como ese ano late y le aprieta el dedo mientras ella acaba. Ella siente que esa sensación de tener un dedo en la cola es simplemente hermosa.
Ahhhh. Me encantó Cesar!
Y vos no vas a hacerme nada a mí?
Por supuesto, no soy tan egoísta. Vos te portaste muy bien.
Se mete en el agua. Toma aire y desciende. Le baja el pantalón y se mete toda la pija de él en la boca. Se la empieza a chupar y a acaricirle los huevos. Despues de un rato sube a la superficie para decirle:
Sentate en el borde porque sino me voy a ahogar.
El se sienta en el borde completamente desnudo. Ella se la empieza a chupar. El le agarra la cara y se la levanta para mirarla a los ojos.
Mirame. Quiero verte con mi pija en la boca.
Ella pese a la vergüenza que le daba, se sentía en deuda por todo lo que este chico la había hecho gozar. Y decidió no solo complacerlo sino tambiennaumentar la apuesta:
Si? Te gusta verme con tu pija en mi boquita? Decia ella extasiada
Siii. Me encanta la cara de puta que tenes.
Ella lejos de ofenderse, se dio cuanta que se calentaba con los sucios comentarios de Cesar. Y siguió adelante:
Siiii. Voy a ser muy puta. Sólo para vos.
Me encanta verte como me la chupas.
Y a mi me encanta tu pija.
Ahhhh. Y te tomarías mi lechita?
Mmm, no se. Nunca tomé lechita
Ahhhh voy a acabar…
Siii acabame en la boquita, decía ella y se pasaba la punta de la pija por los labios cerrados mientras lo pajeaba.
Él acabó como un poseído y el primer chorro le baño la cara. Para el segundo, creyéndolo menor en cantidad, abrió la boca y lo recibió. Pero su sorpresa llegó cuando se dio cuenta que los siguientes chorros no disminuían ni en fuerza ni en caudal. Se sorprendió a sí misma con mucha leche en la boca y chupando la pija. Tragó y no le pareció feo sabor. Pero aún le quedaba mucha leche y la utilizó para jugar con ella y la pija con su lengua provocándole a el un placer indescriptible. Siguió jugando y chupando. Y tragando. Y no pudo creer cuando al final lo miró a los ojos y tomó la leche que le corría por la mejilla con un dedo y se lo metió en la boca chupándolo y mirándolo con una cara de trola que calentaba a mas no poder.
Se empezaron a reír y a cambiarse. A ella le entró un poco la culpa por lo que acababa de hacer. El, que se dio cuenta, la abrazó fuerte y ella, lejos de separarse, lo miró nuevamente y lo besó en la boca. Era el primer beso en la boca que se daban. Después de todo lo que habia pasado entre ellos era increíble estar besándose sobre el final. El sintió el sabor de su semen. Ella lo abrazó tiernamente, como quien abraza al amor de toda la vida. Al rato se estaban riendo a carcajadas, justo cuando Lucía y yo llegábamos de coger como locas.
Esto nos empataba. Yo también le conté lo que pasó con Hernán y con mi hermano. Empecé a contarle todo con lujo de detalles y al final terminamos cogiendo como locos. Definimos que seguiríamos así y prometimos que no volveríamos a engañarnos, salvo que la otra persona lo autorice. El puso condiciones, más sabiendo que yo volvería a vivir con mi hermano bajo el mismo techo. Yo le dije:
Y si vos te cogieras a tu hermana? Me tendrías confianza?
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